EL CAMINO ES RESBALOSO

 

1 Sam 2:9 El guarda los pies de sus santos, más los impíos perecen en tinieblas; porque nadie será fuerte por su propia fuerza.

 

El Espíritu Santo nos abre el entendimiento para comprender las escrituras.

No se trata de imitar a nadie, no podemos interpretar la partitura de otro, sino la que Dios nos da, la nuestra.

 

El hombre por su propio esfuerzo, su propio poder y fuerza, nunca puede llevar a cabo nada que sea aceptable para Dios.

El camino es resbaloso, y nuestros pies son débiles, pero el Señor guarda nuestros pies con el calzado del evangelio, de guerreros de Cristo, de los hijos de Dios. 

 

Por medio de la obediencia en fe, para ser sus santos apartados para Él, Él mismo será nuestro guarda y a través de sus ángeles, perseveran nuestras actividades.

 

El que habita al abrigo del Altísimo morara bajo la sombra del Omnipotente.

Bajo el poder de Dios, Él impedirá que nuestros pies resbalen para que no manchemos nuestros vestidos, no lesionamos nuestra alma y provoquemos que el enemigo blasfeme.

 

Tito 1:15-16

Todas las cosas son puras para los puros, más para los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas. Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.

 

El impedirá que nuestros pies se descarríen, que no nos adentramos en caminos de error, senderos de insensatez, costumbres mundanas.

 

La insensatez es la falta de prudencia y madurez antes de actuar. Falta de dominio propio.

 

Él impedirá que nuestros pies se hinchen por cansancio, o se llaguen por lo escarpado y largo del camino de pedregales, angosto y difícil.

 

Él impedirá que nuestros pies resulten heridos: nuestros calzados serán de hierro y de bronce bruñido, pulido por la Palabra que da brillo da luz, de tal forma que, aunque pisemos sobre el filo de la espada, o sobre serpientes mortíferas, no podremos resultar envenenados.

 

Él arrebatará nuestros pies de la red. No quedaremos atrapados en el engaño de enemigos maliciosos y astutos.

 

Con una promesa como esta, corramos sin cansancio, y caminemos sin temor, en toda libertad en Cristo.

 

El que guarda nuestros pies lo hará eficazmente, con el calzado del apresto del evangelio.

 

Jer 17:10 Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras.

 

Corramos sin temor, sin cansancio en toda libertad en Cristo, Él guarda nuestros pies y lo hará eficazmente.

 

Job 33:27 Él mira sobre los hombres; y al que dijere: Pequé, y pervertí lo recto, Y no me ha aprovechado, -28 Dios redimirá su alma para que no pase al sepulcro, Y su vida se verá en luz.

 

Lo que el Señor ha hecho, hace y hará seguirá haciendo mientras el mundo subsista. Recibirá en su seno a todos los que vengan a Él con una sincera confesión de su pecado; Dios está atento a cada uno de nosotros dándonos misericordia que cada mañana son nuevas, esperando en su infinita paciencia que despertemos, digamos pequé y pervertí lo bueno y para nada me sirvió.

 

Si el pecado pasa al sepulcro es perdición.

Acudamos con este reconocimiento honesto, temerosos de Dios, para pedir perdón en arrepentimiento de forma genuina, y ello nos hará libres. No podemos hacer menos, usemos Su promesa en el nombre de Jesús.

 

Él nos redime del abismo del infierno que abre sus fauces para tragarnos.

Él redime nuestra alma y nos libra de la muerte eterna, para darnos luz, el camino y la vida.

 

Nuestro arrepentimiento sincero nos lleva a la alabanza a Dios.  YAWHE TZE VA OT, YAHSHUA HAMASHIAJ





Entradas populares de este blog

Eliseo y la Sunamita ( siete estornudo, siete años)

LAS VESTIDURAS

El Espíritu Santo revela a Cristo