Nada oculto que no haya de ser manifestado


Nada oculto que no haya de ser manifestado

El peligro de la apostasía final aumenta en proporción a la declinación espiritual.

Marcos 4:25 Porque al que tiene, se le dará; y al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.

Jesús establece un principio de su reino, si el creyente no sigue adquiriendo la verdad y la gracia, perderá hasta lo que tiene.

Es innegable que el creyente que no crece pierde su firmeza espiritual.

Hebreos 6:11 Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la esperanza,

Hebreos 6:12 a fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas.

Los que se mantienen fieles a Cristo en fe y amor, la esperanza de salvación eterna es segura e invariable, porque Dios no puede mentir y sus promesas permanecen firmes.

Marcos 4:21 También les dijo: ¿Acaso se trae la luz para ponerla debajo del almud, o debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero?

Marcos 4:22 Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz.

Marcos 4:23 Si alguno tiene oídos para oír, oiga

Al servir a Cristo, los discípulos estarán expuestos a recibir contraataques de satanás, pero no tienen que tener miedo porque serán sostenidos por el Espíritu Santo y el Padre, permaneciendo fieles a la Palabra de Cristo, predicando sincera y valerosamente.

La luz de Cristo extiende amor y sanidad, abraza con su misericordia en paz y armonía, transforma y regenera nuestros corazones, perdona nuestros pecados y nos edifica en gozo y en visión de un nuevo vino, lleno de esperanza e inquietudes para avivar con amor al prójimo.

Un avivamiento, un despertar en nuestros corazones latentes al reino de Dios y presente en el mundo iluminando grandemente los corazones a través de la luz y el amor de Cristo, el cual nos concedió la gracia inmerecida y la libertad del pecado con sus llagas y su sangre. Un sacrificio perfecto por el cual el mundo se ha liberado de la esclavitud del pecado, de sus ataduras, de sus cadenas, solamente creyendo en Cristo como hijo de Dios y cual el gran propósito de Dios es glorificar a su Hijo en el cielo y la tierra.

Estando en koinonia en Cristo, en libertad, en amor, en su palabra, en oración, en testimonio, en ayuno, en humildad, en servicio, en sencillez, en sensatez, el Señor traerá revelación y visión a nuestros corazones y un resurgir creativo en Cristo fluyendo todo el potencial que Él puso en cada uno de sus hijos.

Así nuestros oídos oirán y nuestros corazones gozaran en el amor y la paz de Cristo y de nuestro aliento Santo, Santo, Santo es el Señor Jesús.

Dios les bendiga

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