Un adorador

Podríamos definir a un adorador, como aquel que se entrega en una íntima y profunda manifestación de gratitud y alabanza a Dios. No importando las circunstancias por las que está pasando eleva adoración que sale de su corazón, de su espíritu. Adora en lo secreto como en público, no depende de otro para expresar lo que el creador de su alma le inspira, no se rige por ideas humanas sino por la Palabra y está siempre dispuesto a rendir todo su ser a Él.

La adoración pública (Marc. 6:45-46) generalmente carece de intimidad. La adoración pública debe ser un reflejo de la adoración en lo secreto. La adoración intima se da en la intimidad de mi corazón y de mi habitación. Que pensarías de un hombre que en la intimidad nunca le dice a su esposa que la ama, nunca le muestra afecto, pero en público la trata maravillosamente. Todo tipo de halagos y cariños salen de sus labios cuando la gente los ve. ¿Pensarías que este hombre es un hipócrita verdad? Pensarías que solo pretende para ser visto por los demás. Así suena la adoración pública que no está respaldada por una adoración privada. Cuando en la adoración no hay intimidad, esta carece de deleite y se torna una carga o una obligación. 

La adoración pública que es la que hacemos en la iglesia o con un grupo de personas es agradable a Dios sin lugar a duda, pero hablamos de los que ministran adoración, los que están dirigiendo un grupo de alabanza, los que son parte de este grupo a estos es que hay que formar, enseñar con la palabra, que alabar a Dios no es solamente ponerse en el púlpito y cantar canciones de alabanzas, es mas que eso, un adorador es una persona que a:
  Cultivado una relación intima con Dios 
  Una vida de oración, estudio de la palabra 
  ha ejercitado en búsqueda de la voz de Dios en su vida

A esa relación intima con el padre celestial se le llama adoración, entonces cuando tu te presentas delante de un grupo de creyente ya sea con tu voz o un instrumento musical es donde tu prueba todo lo anterior, si tu ministración llega a los corazones, si es eficaz para sanar, liberar, salvar almas entonces tu eres UN ADORADOR.

Testimonio: Dios me llamó a través de un ensayo de un grupo de alabanzas, este grupo ensayaba los jueves y yo desde el patio del lugar donde yo trabajaba escuchaba las alabanzas, algo cambio dentro de mi y a partir de ese momento me he convertido en una sierva de Jesucristo. !Gloria a Dios!!!!!

Escrito por:

Mercedes Jiménez

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