SOMOS DE CRISTO
SOMOS
DE CRISTO, EL VERBO DE LA VIDA
Prov
16:7 Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová,
Aun
a sus enemigos hace estar en paz con él.
Esta
es la promesa de Dios a Israel de que su tierra sería protegida del
ataque hostil, si hacemos su voluntad. La enorme importancia de
seguir la guía del Espíritu Santo, de escuchar el corazón de
Cristo y leer su Palabra, de orar en todo momento. Estar en la
cobertura de Cristo Jesús y tener puesta la armadura de guerrero.
También
se recibe hostilidad de los enemigos, satanás y el mundo por estar
haciendo la voluntad de Dios.
Mat
5:10 Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la
justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Recibiremos
adversidad por hacer la voluntad de Dios.
1
Ped 3:14 Mas también si alguna cosa padecéis por causa de la
justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis por
temor de ellos, ni os conturbéis,
Jn
15:19 Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no
sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os
aborrece.
El
mundo y incluso las falsas iglesias y organizaciones religiosas
siempre se opondrán a Dios y a las normas de su reino; por ello el
mundo siempre seguirá siendo un enemigo y perseguidor de los fieles
hasta el fin.
Somos
diferentes porque ya no somos del mundo, somos de Cristo, y nos
negamos a comprometernos a normas impías.
Col
3:2 Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Las
autoridades religiosas que no se adhieren a la enseñanza de Jesús.
Esos supuestos creyentes, tienen un concepto tan diferente de la
verdad del evangelio que cuando persiguen y matan a los verdaderos
seguidores de Cristo, piensan que le están prestando un servicio a
Dios, como Saulo de Tarso pensaba.
No
se puede vencer al mundo desde el mundo. Se vence al mundo en los
caminos de Dios.
Ju
16:1 Estas cosas os he hablado, para que no tengáis tropiezo. -2 Os
expulsarán de las sinagogas; y aun viene la hora cuando cualquiera
que os mate, pensará que rinde servicio a Dios. -3 Y harán esto
porque no conocen al Padre ni a mí.
Jesús
aquí hace referencia a la persecución, oposición y hostilidad de
autoridades y congregaciones religiosas.
La
llegada del Espíritu Santo, su obra principal con relación a la
proclamación del evangelio es la de descubrir al pecado. Cuando
autoridades religiosas persiguen y matan a verdaderos seguidores de
Cristo, es porque no están adheridos a la enseñanza de Jesús.
El
Espíritu Santo pondrá al descubierto la culpa y la incredulidad,
toda religiosidad, para despertar la conciencia respecto al pecado,
abrir los ojos a que hay que ser hacedores de la Palabra no sólo
oidores, y a pedir perdón, sentir la necesidad de pedirle perdón a
Dios.
El
Espíritu Santo convence a las personas de que Jesús es el justo
Hijo de Dios, resucitado, justificado y ahora el Señor de todos. Él
nos hace conscientes de la norma de justicia de Dios en Cristo, les
muestra lo que es el pecado y da poder para vencer al mundo.
El
Espíritu Santo convence a las personas de la derrota del contrario
en la cruz, y del juicio venidero para toda la humanidad.
Mt
16:27 Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con
sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.
Salm
62:12 Y tuya, oh Señor, es la misericordia;
Porque
tú pagas a cada uno conforme a su obra
Mt
16:18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca
edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán
contra ella.
Jesús
afirma que sobre una enorme roca edificaré mi iglesia. La roca es
Jesucristo, el primer y gran fundamento de la iglesia.
1
Co 3:11 Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está
puesto, el cual es Jesucristo.
Pedro
afirma en su primera carta que Jesucristo es piedra viva... la
principal piedra del angulo.. la piedra que los edificadores
desecharon (1P 2:4,6-7).
Los
demás creyentes de Cristo somos piedras vivas que formamos parte de
la estructura de la casa espiritual que Dios está edificando.
1
Ped 2:5 vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como
casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios
espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.
En
ninguna parte de las Escrituras se afirma que Pedro sería la
autoridad suprema sobre los demás discípulos, tampoco que Pedro
tendría sucesores que funcionarían como cabeza oficial de su
iglesia.
Las
fuerzas de maldad del mundo se esfuerzan por destruir a la iglesia de
Jesucristo. Ninguna iglesia debe caer en la inmoralidad, error
doctrinal o apostasía (apartarse de la Palabra de la verdad del
evangelio). Jesús mismo predijo que muchos se apartaran de la fe, y
Él les advierte a las iglesias que están abandonando la fe del NT
que se vuelvan de su pecado o quedaran fuera del reino.
1
Tim 4:1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros
tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus
engañadores y a doctrinas de demonios;
Mat
16:19 Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo
que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que
desatares en la tierra será desatado en los cielos. (Mateo 18. 18)
Juan
20:30 Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus
discípulos, las cuales no están escritas en este libro.
En
el evangelio de Juan vemos que, lo que Jesús enseñó y las cosas
que hizo están ligados en forma inseparable con lo que Él es.
Juan
muestra a Jesús como totalmente humano y totalmente divino. A pesar
de que Jesús tomó por completo nuestra humanidad y vivió como un
hombre, nunca dejó de ser el Dios eterno que siempre existió, el
creador y sustentador de todas las cosas, la fuerza que une la
creación y la fuente de la vida eterna.
Esta
es la verdad acerca de Jesucristo. Si no podemos creer esta verdad
sobre Jesucristo no tendremos la fe suficiente para confiarle nuestro
destino eterno.
Por
eso Juan escribió su Evangelio: para edificar la fe y la confianza
en Jesucristo al grado que creamos que Él en realidad era y es el
Hijo de Dios.
La
mejor manera del apóstol Juan de explicar a judíos y griegos que
Jesucristo es Dios, fue declarando que Jesucristo es LOGOS O LA
PALABRA DE DIOS.
El
mismo Jesucristo lo confirmo, sabemos que una palabra o verbo se
forma de letras, y Cristo señalo ser el Alfa y la Omega que son la
primera y última letras del alfabeto griego; Ap 22:12-13, “12He
aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a
cada uno según sea su obra. 13Yo soy el Alfa y la Omega, el
principio y el fin, el primero y el último”.
Juan
concluye este tema señalando que Jesucristo es la PALABRA de Dios
encarnada, Jn 1:14, “14Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó
entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del
Padre), lleno de gracia y de verdad”.
Cristo
creo todo cuanto existe, cada elemento y cosa ya sea del reino
animal, vegetal o mineral, cada persona y cada ser ya sean materiales
o espirituales, angelicales o humanas,
Col.
1:16, “Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en
los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean
tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue
creado por medio de él y para él.”
Jesús
es la fuente de vida eterna porque es la luz verdadera, Jn 8:12,
“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el
que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la
vida”.
La
luz de Jesucristo brillo en la oscuridad, Jn. 12:46, “Yo, la luz,
he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí cree no
permanezca en tinieblas”.
Jesucristo
vino a este mundo como Dios encarnado a ofrecer salvación y vida
eterna, primero al pueblo judío del cual nació y luego a toda la
humanidad.
No
obstante Cristo, el verbo de Dios, la luz verdadera, fue rechazado
por la mayoría de los judíos y los gentiles de la época, quienes
no creyeron en Él, porque siguieron en sus tradiciones religiosas,
idolatría y paganismo.
Asimismo
hoy día muchas personas continúan rechazando a Cristo, por seguir
tradiciones religiosas, y por tener su mirada en la vanidad y
placeres pecaminosos de este mundo.
Sin
embargo, toda persona que ha creído en Cristo, reciben de Cristo el
privilegio más grande que un humano pueda recibir en esta tierra.
Cristo que es la fuente de vida le da vida espiritual y lo ingresa a
la familia de Dios dándole derecho de heredar la patria celestial.
El
amor la misericordia y la justicia forman parte de la naturaleza
Divina que Dios usa para lidiar con nosotros. A través de Moisés
Dios trajo la ley que nos muestra el pecado y la condena. Pero Cristo
vino para resaltar la misericordia, el amor y el perdón de Dios.
Juan
20:23 A quienes remitiereis los pecados, les son remitidos; y a
quienes se los retuviereis, les son retenidos.
Las
llaves representan la autoridad que Dios delegó a la iglesia.
Mediante esas llaves reprendemos el pecado y la iglesia enseña
doctrina, enseña disciplina, enseña a orar eficazmente en el nombre
de Cristo Jesús, se atan demonios y liberan cautivos, se anuncia la
culpa del pecado, la norma de justicia de Dios y el juicio venidero.
Proclamamos la salvación y el perdón de los pecados para todos los
que se arrepienten y creen en Cristo.
Esta
promesa no se aplica a “las puertas del hades no prevalecerán”,
que representan a satanás y toda la maldad del mundo que se
esfuerzan por destruir la iglesia de Jesucristo.
Ningún
creyente, ninguna iglesia, grupo de iglesias o denominaciones caerá
jamás en inmoralidad, en error doctrinal o apostasía.
La
promesa del Señor no se aplican a los que niegan la fe y a las
iglesias tibias.
La
iglesia no será destruida aunque satanás y falsos maestros se
infiltren en el reino de Dios. Por su gracia, soberanía, sabiduría
y poder siempre Dios tendrá un remanente de creyentes y de iglesias
a través de la historia redentora fieles al evangelio de Cristo, en
comunión con Dios, que demostraran el poder del reino y del Espíritu
Santo contra el pecado, enfermedad, lo mundano y lo demoníaco. Es a
esa iglesia a la que no pueden destruir ni hacer frente satanás y
todos sus ejércitos.