AMANDO A VUESTROS ENEMIGOS
VERSÍCULO CLAVE: Lucas 6:44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os
persiguen; 45 para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que
hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e
injustos.
·
AMAD
·
BENDECID
·
HACED BIEN
·
ORAD
Y la pregunta es cómo puedo amar
a alguien que me hace mal, lo primero que tenemos que hacer para poner en
práctica esta palabra, que nos da el mismo Jesucristo es PERDONAR, esta es la
clave, el perdón tiene el poder de liberar AMOR,
si te sientes atrapado en un sentimiento de rencor hacia una persona, si
hay en ti una raíz de amargura, si ha pasado mucho tiempo con esta sensación de
rechazo hacia alguien, es tiempo de revisar tu alma, tu interior; las raíces de
amargura a medida que pasa el tiempo se hacen invisibles, en el sentido que se
hacen parte de ti y ni siquiera tú la puedes ver, cuando llegamos a este punto
de nuestra vida, es porque hemos dejado crecer dentro nuestro algo que nos
llevará a perder el amor por los demás y esto es una de las trampas que caen
muchas personas, esta trampa no es nada más y nada menos que el engaño del
enemigo, que te dice si te hizo mal, porque hacer bien,? ¡!!!véngate!!!esta es una ministración del
mismo enemigo, no hagas caso de esto porque Dios dice que ame, no que maldiga,
interceder a favor de ellos, esto tiene un efecto tremendo si lo pones en
práctica veras resultados asombrosos, porque de ti correrán ríos de aguas
vivas, el amor de Dios activo en ti.
Puede ser difícil empezar a fluir
en este sentido, pero les aseguro que se puede, y los resultados son: es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad,
Bondad, fe, mansedumbre, templanza;
Para llegar a este nivel de madurez espiritual
necesitamos ejercitarnos en la oración constante y el ayuno.
Lucas 6:32 Si amáis a los que os
aman, ¿qué mérito tenéis? Porque
también los pecadores aman a los que los aman.
El mas grande resultado es ser hijo de vuestro padre que esta en los cielos.(Lucas 6:44)