Las iglesias
Cristo alaba a la iglesia que no tolera el mal, pone a prueba la vida, la doctrina y las afirmaciones de los dirigentes cristianos; persevera en el amor, la fe, el testimonio, el servicio, y el sufrimiento por Cristo; odia lo que Dios odia, vence al pecado, a satanás y al mundo impío; se niega a adaptarse a la inmoralidad del mundo y a la mundanalidad interna; y guarda la Palabra de Dios. Cristo recompensa a las iglesias que perseveran y permanecen fieles a Él y su Palabra: · Librándoles de la hora de la prueba que vendrá sobre todo el mundo · Dándoles su amor, presencia e íntima comunión · Bendiciéndoles con la vida eterna con Dios Cristo condena a la iglesia que le resta valor a la devoción personal e íntima a Él y al Padre Ap 2:4 Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Se aparta de ...